Imaginen una farmacia que incorpora la venta telefónica. ¿Deja de ser una farmacia? No, simplemente tiene un canal más de ventas, llegando a más gente y que se encuentra más lejos. Del mismo modo, una librería que incorpora un par de computadoras en sus sucursales para acelerar la búsqueda de libros de sus clientes, realmente no cambia el modelo de negocios, simplemente hace más rápido lo mismo que hacía antes.
Entonces amazon.com, abebooks.com, etc., que venden -entre otras cosas- libros por internet ¿no son otra cosa que un canal más de ventas? Wrong.
Una librería tradicional centra su negocio en el alto rendimiento de pocos productos; muchas ventas de pocos libros, de los que mejor tener varios ejemplares para no perder ventas. Estamos hablando de best sellers como Harry Potter y también de diccionarios inglés-español que cada tanto alguno sale.
Pero la enorme capacidad de los buscadores que poseen los sitios mencionados, la minimización de los costos de almacenamiento y distribución que posibilita internet, sumado a la ubicuidad de su acceso, posibilita que una parte nada despreciable de la facturación de estos sitios provenga de la suma de pocas ventas de muchísimos libros, lo que aparece en amarillo acá abajo y que se llama en estadística "la larga cola".
En una librería tradicional no tiene sentido tener en stock y ni siquiera en catálogo "Un soldado del Kazajstan (1959)", de Gabit Musrepov o "Rodeada está tu sueño (Memorias poemáticas de un caballero desconocido) (1946)", de Eduardo Mallea. Tengamos en cuenta que tener un libro en stock implica un costo de almacenaje y de distribución y un capital inmovilizado. Pero "la interné" cambió eso, y los 7 fanáticos de Mallea que hay en el mundo van a poder conseguir su libro estén donde estén y con sólo un par de clicks del mouse.
Como dice el artículo que le recomiendo a los que quieran ampliar:
Los costes de almacenaje y distribución de Amazon (...) son bajos, lo que les permite disponer de un catálogo de productos muy amplio, que cubre una gama extensa de gustos e intereses. Amazon tiene un catálogo de 2.300.000 de libros, mientras que su competencia en el mundo físico, Barnes&Noble, dispone de 130.000.
Hay mucho más para decir pero dejémoslo para otra oportunidad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario